¿Cuál es la primera experiencia que recuerdas con la música?
Desde muy chiquita, a los 5-6 años, empecé a sentir un interés especial por el piano, en mi escuela primaria, me escapaba en los recreos para ir a “acariciar” el piano, y finalmente a los 9 años mi maestra de música convenció a mis papas para que me hicieran estudiar este instrumento.
¿En que momento decidiste que querías ser cantante?
A los 18 años, cuando empecé la Universidad, el primer año teníamos pocas materias, mucho tiempo libre y empecé a cantar en un coro. En el coro decían que mi voz era “chillona” y me mandaron a estudiar técnica vocal. Fui como para hacer una “penitencia”, y luego descubrí el mundo de la ópera y me enamoré. Fue duro dejar el piano y elegir ser una cantante, al principio mi familia no lo entendía, hasta que me vieron debutar a los 19 años, y se dieron cuenta de que era mi pasión.
¿Qué personalidad musical crees que te influyó más en tu carrera?
Seguramente Beethoven, empecé a escucharlo desde muy chica y me identifiqué mucho con su música y su personalidad, luego, mientras estaba en la Universidad, dos cosas: era el 1992, y escuchar la versión de “Barcelona” con Freddie Mercury e Montserrat Caballé, me hizo conocer por primera vez una soprano, y cuando mi profesora me dijo “vos podés llegar a cantar como ella” no lo podía creer, pero lo tomé como desafío e inspiración. Luego vi la película “El maestro de musica” donde la protagonista cantaba “Sempre libera” de “La traviata” con orquesta y ahí enloquecí, dije, quiero cantar esto algún día. Allí cambio todo en mi vida…
¿Cuáles son tus cantantes o músicos favoritos?
María Callas es el mito de todas las sopranos, pero si tengo que decirte con quienes me identifico mas vocalmente, debo decir que mis modelos son Montserrat Caballé y Mariella Devia. En cuanto a los compositores, mis autores favoritos son Mozart, Verdi, Puccini y Donizetti.
¿Cuál era el estilo o el compositor que más te gustaba estudiar de joven?
He cantado mucho repertorio barroco, y sobre todo Mozart, ideal para los inicios de cualquier cantante, y sobre todo porque exige una técnica vocal sólida, y empezar debutando estos roles asegura longevidad vocal. Tuve que tener paciencia hasta que pude empezar a estudiar “La traviata” de Verdi, que era un rol que adoré desde el primer día pero que no estudié hasta los 22 años.
¿En qué repertorio te sientes más a gusto en la actualidad?
Desde 2003, que llegué a vivir a Italia, y me acerqué al mundo del “belcanto”, gracias a mi profesora la mezzosoprano Franca Mattiucci, quien me indico que mi repertorio era el de soprano lírico de coloratura, y me enseñó todo lo que hay que saber con el belcanto, me estoy especializando y me siento muy cómoda con Donizetti. Sigo también trabajando muy bien con roles mozartianos y con el cambio de mi voz que se esta haciendo mas lírica, pronto podre abordar otros roles del “primer Verdi”.
Cuéntanos, por favor, alguna experiencia o anécdota que te venga a la memoria que tenga que ver con tu voz o tu experiencia profesional (en algún curso, o concierto...)
Una de las cosas que un cantante espera, son esos pocos momentos mágicos donde se siente que hay una conexión especial con el público. Desde mis inicios, y gracias a mi facilidad por la actuación, todo el mundo me decía que yo sabia “tocar” con mis interpretaciones la sensibilidad del publico. En agosto 2011 sucedió que mientras estaba cantando “La traviata” en el Castillo de Schloss Braunfenls (Alemania), hermoso escenario al natural, en un patio gigantesco de paredes de piedra, durante el dúo “Dite alla giovine”, yo estaba cantando y “llorando” (actuando obviamente, ya que al inicio lloraba de verdad y tuve que aprender a controlarme sino no podría seguir cantando) y como estaba a medio metro de las primeras filas, veía a los espectadores que lloraban conmigo. Al final del duetto, en lugar del aplauso, se hizo un silencio que duro 5-6 segundos… no fue “frustrante”, al contrario, el clima era tal que nadie quería romper esa “mágia” creada por la música, el escenario y los sentimientos de los allí presentes. Me puso la piel de gallina….
Otra anécdota de la misma performance fue que durante el aria del I acto “E strano” empezó a llover, y la gente en un gesto automático abrió sus paraguas pero nadie se movio…. Y yo canté el aria bajo la llovizna, sin renunciar a cortar la ópera ni perder el hilo de la historia…. Soy muy peculiar en ese sentido, nunca he cancelado una función y he cantado con fiebre y en condiciones no siempre al tope varios de mis roles, incluida la dificilísima Reina de la Noche.
¿Qué opinas de la situación actual de los músicos y los cantantes? ¿Que crees que debería cambiar?
Es muy difícil, desde el punto de vista económico (hay menos recursos) y hay mas competencia (mas cantantes). Muchas veces no sirve solo la “bravura”, hay que tener contactos justos (llamase Agencia, conocidos, etc). También hay muchas agrupaciones que ilusionan a cantantes con producciones, pidiendo dinero para audiciones y luego los proyectos no se hacen o no prosperan. Esto es injusto porque el cantante necesita una preparación (maestro, repertorista, etc.) que cuesta dinero y si para hacerse escuchar tiene que pagar entre 50 y 80 euros, más viajes, etc y luego las cosas no son serias se pierde tiempo, dinero e ilusión.
Es una carrera dura y la competencia esta siempre al día, pero con estas cosas muchas veces te dan ganas de bajar los brazos. Por suerte también existen teatros y agrupaciones serias, donde podemos esperar tener oportunidades.
¿Qué proyectos musicales tienes en mente realizar?
En estos momentos estoy repasando para debutar próximamente en el Teatro Municipal de Santiago de Chile (donde en mayo de este ano debuté “Lucrezia Borgia” de Donizetti) Donna Anna del “Don Giovanni” de Mozart, un rol difícil técnica y caracterialmente, pero como todo lo que hago, un desafío. Yo ya había cantado Donna Elvira, y me entusiasma la idea de poder dar vida a este nuevo personaje. Paralelamente estoy estudiando “Anna Bolena” de Donizetti y pretendo poner en repertorio todo el “Ciclo Tudor” proximamente.
¿Qué consejo o recomendaciones darías a los que empiezan ahora a estudiar canto?
Como decimos en Argentina, “no aflojar”, o sea, no rendirse. Prepararse a recibir muchos NO, y muchas criticas, pero no amedrentarse por esto. Estudiar tanto, escuchar los consejos del Maestro de Canto, y sobre todo, no apurarse con roles no aptos para la voz o la edad. Estudiar música, no solo canto, Historia de la Música, y escuchar tanto, sobre todo a los grandes cantantes, que tienen tanto que enseñarnos.
¿Quieres añadir algo más sobre tu relación con la música o con el canto?
Sin la música mi vida no tendría sentido. Sin el canto mucho menos. Me gustaría que la gente pudiera apreciar no solo la belleza del canto sino todo el trabajo que hay detrás y poder reconocerlo. Seria todo mas fácil. Por ultimo, creo que si todos nos diéramos la posibilidad, podríamos aprender a amar el canto y sobre todo, la ópera lírica.
Más info: www.natalialemercier.com