Está disponible en Prime y en Filmin el biopic, dirigido por Cynthia Mort, Nina Simone, un drama del que pueden extraerse muchas enseñanzas sobre el funcionamiento de la industria musical, el papel de la mujer en la misma o la canción como arma de protesta y reivindicación.
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| Eres lo que escuchas |
Es una película que no sólo narra la biografía de la inmensa cantante Nina Simone, sino también el contexto social y cultural que le tocó vivir.
Superando un contexto inicial difícil
Como muchos otros cantantes, empezó cantando en la iglesia de su comunidad, mostrando gran afinidad con el piano, especialmente.
Tuvo que vivir el racismo y la discriminación ya desde pequeña puesto que en su debut en un concierto de piano a la edad de doce años hicieron a sus padres levantarse de la primera fila y ella se negó a seguir tocando hasta que sus padres no volvieran al sitio al que se les había asignado.
En la película la discriminación racial es un hilo conductor y tenemos que tener en cuenta que Nina Simone vivió todo el movimiento antiracista en los EE.UU. liderado por Martin Luther King.
Cantando para expresar su esencia
En el film se narra la muerte del mismo y cómo decidió Nina canalizar toda su rabia y su dolor a través de las canciones (canto de amor porque no tuve y de política porque soy mujer y porque soy negra, afirmaba).
Consiguió estudiar piano en la prestigiosa escuela de música Julliard de Nueva York e intentó conseguir una beca para el instituto de música Curtis de la misma ciudad, pero fue rechazada, según cuenta en la película, por el color de su piel, y seguramente también por ser mujer, puesto que "no les cuadraba" un perfil de pianista negra tocando clásica en lugar de cantar.
Por ello, por necesidad de comer, abandonó la música clásica y se acercó a la música de jazz, comenzando su carrera por la que fue famosa, como cantante-pianista.
Vaivenes con la industria musical
En la película se narra también la complicada relación con la industria musical ya que tuvo que pleitear por los derechos de sus canciones, que habían sido vendidos por las discográficas y tuvo serias dificultades económicas que le llevaron a salir de EE.UU. y emigrar a Francia.
Obviamente, la industria musical siempre tiene más recursos que los propios cantantes a la hora de defender las cuestiones pecuniarias.
Está claro que los compositores deben tener garantizado un mínimo de derechos de autor para poder subsistir y en este caso la dejaron totalmente desposeída de ellos.
La especial voz de Nina Simone
Es curioso, tan acostumbrados que estamos a escuchar voces agudas, tanto de mujeres como de hombres, que una contralto conquistara la audiencia.
Sin duda, la calidez de su timbre, la sensibilidad a la hora de cantar, su pasión y el dominio de su voz fueron el cóctel necesario para enamorar a miles de oyentes.
Un icono social con carácter único
Sin duda también, el haberse convertido en un icono de la lucha por los derechos sociales de la comunidad negra y de las mujeres fue clave.
Hay varios momentos en la película en los que se muestra ese agradecimiento de los fans y esa fidelidad a su música.
Sin embargo, Nina Simone tuvo un carácter difícil y le costó mucho dejarse ayudar porque desconfiaba de todo el mundo. Encontrar el equilibrio personal es fundamental para un cantante.
Sin una autoestima equilibrada y un foco claro en aquello que se desea hacer es muy fácil que el ego venza a la persona y se piense que está por encima de los demás y por encima hasta del bien y del mal, en el sentido de que puede tratar mal a su cuerpo y su mente.
Realmente es para reflexionar sobre los cuidados que debe tener un cantante y las personas que debe tener alrededor, puesto que, tal y como se muestra en la película, la industria musical tiene tendencia a tratar a los cantantes como una inversión a la que sacarle partido y muchas veces a costa de la salud de la persona.
