Cuando encuentran o descubren que pueden cantar en ese registro sus voces se vuelven dúctiles, afinadas, expresivas y los niños son capaces de afrontar nuevos retos vocales cada más exigentes.
Muchas veces nos encontramos con que se tiende a descuidar la afinación. Considero fundamental el trabajo interválico preciso y la exigencia de una correcta afinación a todos los miembros del coro.
Os dejo enlace de mi trabajo (basado en Kodaly, adaptándolo a nuestro folklore) en este sentido y una muestra en vídeo de este gratificante y maravilloso trabajo.