Por: Redacción
La industria musical tanto de España como a nivel mundial, debe plantearse que un buen beatboxer les puede servir como productor musical, al aportar buenas ideas musicales así como formando parte de una banda y así muchas otras cosas más.
Esto porque en definitiva, un buen beatboxer es alguien que por llevar el ritmo por dentro, lo integra a su cuerpo y a su cabeza, hasta el punto de que resulta difícil trazar una línea entre él y el ritmo, pues llegan a ser uno solo.
El arte del beatbox ha ido transitando de forma paralela al desarrollo tanto tecnológico como estilístico dentro del terreno musical. Actualmente, la música electrónica bailable ha logrado tener tanto peso como lo ha hecho el hip hop, como disciplina.
Si los años 80’s pusieron las bases del beatbox y en la década de los años 90’s se considera fue un periodo de crecimiento y madurez, este boom llegó con el cambio de siglo y se acrecentó gracias a la aparición posterior de los tutoriales en internet.
Marcos Martínez a quien mejor se le conoce como “el hombre-orquesta” en el programa televisivo “La Resistencia”, también pertenece a esa generación de beatboxers que aprendieron por su cuenta, sin ayuda de YouTube.
Grison es como se le conoce popularmente en el mundo del beatbox, cuenta que él no se inició en este mundo a través del hip hop, más bien lo hizo por un percance del destino.
Comenzó en el año 2003 luego de que por accidente que tuvo esquiando, se rompió un brazo y como era guitarrista en ese entonces, le prohibieron tocar durante seis meses.
Grison había visto algo de beatbox por ahí, pero no le había llamado mucho la atención, un tiempo después decidió probar por su cuenta más por curiosidad que por otra cosa.
Además el artista afirma que los de esa generación son todos autodidactas, ya que no habían libros, ni cursos y mucho menos tutoriales online como los hay actualmente, en esa época se aprendía a base de error y ensayo así como también compartiendo conocimientos con otra gente y participando en competiciones.
En otro aspecto las categorías que integran el “Spanish Beatbox Battle” (que es el único campeonato que otorga certificación internacional y que además otorga el pase al Beatbox Battle World Championship), lo primero que llama la atención es la existencia de una sección “individual femenina”.