Por: Redacción
La vida y creaciones de Alberto Iglesias
El cantante Alberto Iglesias, nacido en San Sebastián, es el compositor de muchas bandas sonoras de películas españolas y extranjeras, la mayoría de las cuales han sido dirigidas por Pedro Almodóvar.
Iglesias nació en San Sebastián en 1955. Estudió piano, armonía y contrapunto en su ciudad natal; luego recibió clases de composición y piano de F. Schwartz en París y estudió técnicas de composición electroacústica de G. Brncic en el estudio Phonos de Barcelona.
Durante sus primeros años, Alberto Iglesias también recibió formación en armonía y contrapunto junto al compositor Francisco Escudero en el Conservatorio homónimo, situado en San Sebastián.
Más adelante, continuó sus estudios en París aprendiendo sobre composición y plano y luego en Barcelona sobre música electrónica.
Lo más destacable dentro de su carrera como intérprete podría decirse que es cuando formó un dúo de música electrónica junto a Javier Navarrete (de 1981 a 1986), que les permitió realizar giras en varias ciudades, donde sus composiciones eras bien recibidas.
Iglesias y el mundo cinematográfico
Iglesias llegó al cine por medio del mundo de los cortometrajes, donde tuvo la oportunidad de realizar algunos junto a su hermano y el directos vasco Montxo Armendáriz.
De ahí pasó a producciones de mayor duración cuando se le dio la oportunidad de colaborar en la película de 1984 La Conquista de Albania, del director Alfonso Ungría.
De esta primera oportunidad, tomó experiencia y empezó a abrirse camino hasta llegar a la realización de la partitura compuesta para La Muerte de Mikel, del director Imanol Uribe.
Desde ese momento, su relación con el cine se hizo más fuerte, componiendo bandas sonoras para películas como “El sueño de Tánger” (1986), de Ricardo Franco, “Adiós, pequeña”, de Imanol Uribe, “Luces de bohemia”, de Miguel Ángel Díez y algunas otras menos conocidas como “La playa de los perros” (1986) de José Fonseca o “Lluvia de otoño” (1988) de José Ángel Rebolledo.
Podría llegar a pensarse que la década del 80 fue muy productiva para Iglesias, pero la realidad es que poco fue el reconocimiento que recibieron dichas producciones y la música producida para ellas pasó desapercibida, hasta que se dio la llegada de la siguiente década.
Durante ésta, el compositor dio un paso evolutivo muy grande en su producción musical, cuando empezó a trabajar junto a Julio Medem uno de los referentes más influyentes del cine español.
Medem e Iglesias ya habían trabajado de forma previa a finales de los años 80 cuando Elías Querejeta produjo el mediometraje “Martín” en el que Medem hizo su debut como director.
Como agua para chocolate, esta unión entre compositor y director tuvo frutos muy significativos debido a la química que existía en la creatividad y complementación de ambos talentos.
El propio Medem una vez indicó que sería muy difícil afrontar un nuevo proyecto sin la colaboración de su compositor de cabecera. La gran expresividad y potencia dramática de su cine habían encontrado en Iglesias un fenomenal vehículo de expresión.
Alberto Iglesias el músico compositor
Este músico de origen vasco se ha convertido en un músico español referente en composición para cine, que ha tenido la oportunidad de trabajar en Hollywood, además de ser el primer compositor de España en tener el honor de ser nominado al Premio Oscar de la Academia.
Además, es hermano de la escultora y grabadora Cristina Iglesias, cuyas obras están repartidas por museos y espacios públicos de varios países.
Desde sus inicios en los años ochenta, ha compuesto más de treinta bandas sonoras para películas producidas y dirigidas por los más prestigiosos directores, como Pedro Almodóvar, Oliver Stone o Ridley Scott.
Su trabajo colaborativo con Almodóvar lleva ya más de 25 años y es hoy en día una de las relaciones creativas más sólidas y estimulantes del cine español contemporáneo.
Entre los dos han creado un método personal de narración fílmico-musical, que se transfigura al servicio de las necesidades de cada producción. Una colaboración que rememora aquellas míticas parejas del cine clásico como la de Herrmann con Hitchcock o la de Rota con Fellini.
Su andadura en el mundo de la composición cinematográfica comenzó en la década de los ochenta, pero fue en la década de los 90 cuando inició su mayor éxito componiendo varias partituras para películas dirigidas por Pedro Almodóvar, tales como: La flor de mi secreto (1995), Carne en vivo (1997), Todo sobre mi madre (1999), Hable con ella (2002), La mala educación (2004), Volver (2006), Los abrazos rotos (2009) y La piel que habito (2011).
El estilo musical de Alberto Iglesias
La formación musical de Alberto Iglesias, que incluye estudios de piano, composición, contrapunto y música electrónica, lo ha llevado a configurar un estilo personal ecléctico, con una amplia habilidad para adaptarse a cualquier terreno artístico, pero muy marcado por el post-romanticismo, aparentemente denso, pero con líneas melódicas muy sugerentes y evocadoras.
Precisamente, este estilo lo ha llevado a desarrollarse en el ámbito del ballet, en el que es preciso hablar de su estrecha colaboración con el coreógrafo Nacho Duato, y su Compañía Nacional de Danza, para quienes ha compuesto y producido las piezas ‘Cautiva’, ‘Tabulae’, ‘Cero sobre cero’ y ‘Self’.
Reconocimientos otorgados a Alberto Iglesias
Entre la abundante cantidad de reconocimientos tanto nacionales como internacionales, que ha obtenido a lo largo de su carrera, destacan sus nominaciones en cuatro ocasiones a los Premios Óscar y las innumerables nominaciones a los Premios Goya de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, además de los premios obtenidos.
Alberto Iglesias es el artista español más premiado en la historia de los Goya. En la actualidad cuenta con más de 10 estatuillas y se estima que ha recibido el 30% de los premios para la categoría de mejor música original. El compositor obtuvo la que, hoy en día, es su última estatuilla, en 2019, por su trabajo en Dolor y Gloria.
Los últimos trabajos del artista han sido en películas Maixabel y Madres Paralelas, ambas estrenadas en 2021 y una de las cuales fue nominada en 2022.
¿Cuántos premios tiene Alberto Iglesias?
Como hemos señalado con anterioridad, hablamos del primer español compositor nominado al Premio Óscar de la Academia; quien ha obtenido la Medalla del Círculo de Escritores Cinematográficos en seis ocasiones, por las películas Hable con ella, Te doy mis ojos, Volver, También la lluvia, Quién te cantará y Dolor y Gloria.
También ha estado nominado en otras cinco ocasiones por La mala educación, Che, el argentino; Los abrazos rotos, Maixabel y Madres paralelas.
De la misma manera, ha obtenido el galardón en los World Soundtrack Awards en dos ocasiones por El jardinero fiel, con el premio a la Mejor banda sonora original del año y como Mejor compositor del año.
Por las películas La mala educación y Cometas en el cielo, estuvo nominado en la categoría como Mejor compositor del año.
Su fama internacional también le ha llevado a estar nominado en cuatro ocasiones al Premio Óscar, por El jardinero fiel, Cometas en el cielo, El topo y Madres paralelas.
Pero donde ha forjado su leyenda a nivel de reconocimiento Alberto Iglesias, ha sido en los premios Goya, donde ha obtenido la estatuilla por la Mejor música original en once ocasiones. Asimismo, ha estado nominado otras siete veces más.
Los premios los obtuvo por las películas La ardilla roja, Tierra, Los amantes del círculo polar, Todo sobre mi madre, Lucía y el sexo, Hable con ella, Volver, Los abrazos rotos, También la lluvia, La piel que habito y Dolor y Gloria en el año 2019.
Las mejores bandas sonoras dirigidas por Alberto Iglesias
Si hablamos de este compositor, es de notoriedad recordar su primera banda sonora, realizada en 1983 a la edad de 28 años. Se trata del título La conquista de Albania, que ya marcaba lo que sería su estilo, con composiciones melódicas de gran dulzura.
Entre sus obras destacadas encontramos también la banda sonora original de Exodus: Dioses y reyes, del afamado director Ridley Scott y con estrellas como Christian Bale y Joel Edgerton.
Esta pieza se enfrentó a una situación de cierto compromiso, dado era un ‘remake’ y más, sabiendo que la original fue una gran producción. Pero el músico salió airoso del reto con esta gran obra sinfónica llena de fuerza y dignidad. Una partitura que transmite ternura, majestuosidad y vida.
También merece una mención especial la banda sonora original de Carne trémula, película dirigida por Almodóvar y protagonizada por Javier Bardem y Francesca Neri.
Una deliciosa combinación de piano, instrumentos de cuerda y orquesta, que se acompañan con brillante elegancia en una melodía tranquila y melancólica. Algunos críticos señalan que bien podría confundirse con una sinfonía clásica.
Otra de sus inolvidables bandas sonoras es la de Los abrazos rotos, también junto a Pedro Almodóvar. Además del trabajo de Iglesias, permite escuchar temas de distintos géneros, como A ciegas de Miguel Poveda que se mueve en el flamenco, o Vitamin C de Cat Power, un grupo de rock de los años 70.
Pero las notas de piano aflamencadas del compositor permiten que el director nos ubique en España, en una época actual. Por otro lado, la orquesta rememora recuerdos, nostalgia y desconfianza en una tristísima composición.
Con La piel que habito nació otra obra maestra de las partituras, en torno a esta inolvidable colaboración. En principio, podría aparentar confusión y desestructura, una apertura de temas no cerrados e inconexos que, en lugar de concretizar y explicar, resulta inconcreta y poco explicativa.
Pero esa es su principal baza, el caos y el desorden, en una maniobra de la confusión que genera que el espectador se encuentre tenso, al mismo tiempo que causa una apabullante sensación de inseguridad.
El tema musical no es sobre un personaje al estilo de John Williams, sino de sus impulsos emocionales, de su ira.
Por último, en cuanto a las mejores bandas sonoras de Alberto Iglesias tenemos que considerar El Jardinero Fiel, filme del director brasileño Fernando Meirelles, basado en la novela de John Le Carré.
Justin Death es uno de los temas más conocidos de esta producción y se configura casi como un réquiem, con un clarinete y una guitarra que parecen marcar el camino hacia la tumba.
Fernando Lara, presidente del jurado y director general del ICAA en el año 2007, cuando Alberto Iglesias recibía el Premio Nacional de Cinematografía, concedido por el Instituto de Cinematografía y de las Artes Audiovisuales, comentó “su trayectoria profesional está plena de inspiración, y animada por una constante búsqueda de formas expresivas nuevas y estimulantes en la composición de música para cine. Por ello, lo podemos considerar como uno de los grandes referentes españoles en la música para cinematógrafo.”
En paralelo a sus trabajos cinematográficos, Alberto Iglesias ha desarrollado su carrera compositiva con trabajos y estrenos como:
Habitación en Do (1999-2000): En su obra, Iglesias realiza una reflexión sobre la relación existente entre el cine y la música, utilizando en ella fragmentos de grabaciones de voces.
A registered patent - A drummer inside a rotating box (2001): Pieza radiofónica con texto de Juan Muñoz e interpretada por John Malkovich y música de Alberto Iglesias.
Assault to the Castle (2006-2007): Obra orquestal y vocal en 8 movimientos.
Orfeo en Palermo (2007): Obra para violoncello, efectos especiales (foley artist), narrador y orquesta.
In the land of the lemon trees (2009): Obra para Soprano, Guitarra y Orquesta, compuesta en tres movimientos y estrenada por la Soprano Dawn Upshaw y la Saint Paul Chamber Orchestra en Chicago de ese mismo año.
Cuarteto Breve (2010): Pieza para cuarteto de cuerda, encargo del Liceo de Cámara en conmemoración del 40 Aniversario del Tokyo String Quartet, formación responsable de su estreno en el Auditorio Nacional de Madrid.
Les chansons Legères (2015): Obra para Contratenor, dos Pianos y Orquesta compuesta por cuatro piezas.
El reconocimiento Honoris Causa de Berklee Valencia
Uno de los músicos más importantes del panorama musical cinematográfico español merecía un gran reconocimiento, después de haber trabajado con cineastas de la talla de Pedro Almodóvar, Oliver Stone, Julio Medem, Iciar Bollaín, Bigas Luna e Isabel Coixet.
Siendo cuatro veces nominado a los Premios Oscar, tiene en su vitrina once goyas de la Academia de Cine y ahora ya reina en el universo de Berklee Valencia, la prestigiosa escuela musical con campus en la capital del Turia.
El compositor Alberto Iglesias ha sido nombrado Doctor Honoris Causa por Berklee Valencia en una ceremonia muy emotiva.
El creador de la banda sonora de películas como 'Madres paralelas', 'La ardilla roja', 'El jardinero fiel' o 'Lucía y el sexo' viajo a Valencia acompañado de familiares y amigos para recibir el reconocimiento de la institución, que destaca «su extraordinaria carrera y por la influencia de su trabajo en toda una generación de compositores».
En los últimos cinco años Berklee Valencia ha concedido este título a autores como John McLaughlin, Al Di Meola, Imogen Heap, Lila Downs y Gilberto Gil.
Alberto Iglesias y el mundo de la danza
Lejos del mundo del cine, encontramos la tercera gran asociación de Alberto Iglesias, relacionada esta vez con la danza.
Ha colaborado a lo largo de la década de los 90 con el bailarín y coreógrafo Nacho Duato, que ha montado varios ballets sobre su música y los ha incluido en el repertorio del Ballet Nacional de España, obteniendo grandes éxitos en teatros de todo el mundo.
A propósito de esta colaboración, Iglesias afirma: “Me gusta pasar del cine a la danza y viceversa.” En la danza sucede al revés que en el cine: comienzo yo y termina el coreógrafo, y es un trabajo que tiene también un componente plástico muy grande, pero la música también posee gran contenido.
“En el cine me tengo que adaptar a las imágenes que me dan y a veces sintetizar las ideas, trabajando rápido; y en la danza, no tanto”.
Un ejemplo de la música de Iglesias para danza es su obra “Cautiva” (compuesta de 1987 a 1991, y editada en disco en 1992), escrita sobre textos de Ezra Pound y James Joyce, donde contó con la colaboración instrumental, entre otros, de Javier Paxariño o Eduardo Paz.
¿Cuándo será el próximo Goya para Alberto Iglesias?
Muy pronto puede estar la próxima oportunidad en que este gran compositor tenga de nuevo un Goya entre sus manos.
Si bien su participación en los Goya 2022, con la nominación a Mejor Música Original, por la partitura compuesta para el largometraje Maixabel fue significativa, no fue suficiente para arrebatarle de las manos el galardón a Zeltia Montes, por la música de El buen patrón.
Y aunque en la realización de los Goya 2023, Iglesias estuvo ausente, esto le permitió renovar su capacidad creativa, es probable que el 2024 sea el año donde resurgirá con bríos con una nueva creación musical.
Sin lugar a duda, el talento de Alberto Iglesias es como el buen vino, que cada día va madurando y ofreciendo notas más trabajadas, sutiles y veneradas, apreciadas por los críticos más experimentados del ámbito cinematográfico.
