Por: Redacción
De México para el mundo
Un gran genio musical llegó como regalo al mundo un siete de diciembre, desde la ciudad de Mérida, Yucatán, cuna de numerosos compositores y terreno fértil para trovadores para deleitarnos con únicas y preciosas piezas musicales que conquistaron los corazones de millones de enamorados en todo el mundo.
Manzanero heredó su gusto por la música de su padre Santiago Manzanero, fundador de la orquesta Yucalpetén, que interpretaba música típica mexicana en su natal Mérida.
Fue así como el cantante, a la edad de ocho años sintió amor por lo que su padre hacía, y empezó a ver la música como una gran amiga cuando se matriculó en la Escuela de Bellas Artes.
Uno de los primeros instrumentos que aprendió a tocar fue la guitarra, aunque según sus propias palabras, reconoció no haberlo hecho como debe ser, pues no le resultaba una tarea muy fácil.
Más adelante, con mucho sacrificio su madre logró vender una máquina de coser para comprarle un piano, y todo empezó a fluir. El piano y él se entendían mejor y ese fue el inicio para descubrir todo el talento que llevaba dentro.
El surgimiento de un gran maestro de la música romántica
La primera experiencia de manera formal llegó en 1950, cuando logró componer su primera melodía titulada “Nunca en el mundo” y fue entonces cuando decidió lanzarse a trabajar de manera profesional como pianista.
Dos más dos son cuatro y cuando sumas talento más pasión el éxito está garantizado. Tal fue su compromiso que logró llegar a fungir como director musical de la casa filial de la compañía discográfica CBS International, en México.
Su talento en el género de música romántica le llevó a convertirse en uno de los pianistas más reconocidos, acompañando a artistas como Pedro Vargas, Lucho Gatica y Raphael.
Trabajar como colaborador en la composición de canciones para otros artistas empezó a acompañarlo y fue algo que nunca lo abandonó en su vida, pues fue interpretado por grandes voces como la de Angélica María, Libertad Lamarque, Miguel Bosé, Pedro Fernández, Vicente Fernández y Luis Miguel, entre muchos más.
Altibajos en el camino musical recorrido
En ocasiones nos hemos sentido frustrados cuando vemos que tenemos todas las ganas de compartir nuestro talento y vemos que las cosas no funcionan como quisiéramos, o tenemos tropiezos que nos impiden avanzar a nuestro ritmo ideal.
Quiero que sepas que esto le ha sucedido a todos los grandes cantantes o compositores cuando empezaron, así que lo mejor que puedes hacer es no rendirte y continuar la lucha para alcanzar tu objetivo de llegar a la cima.
A medida que el maestro Manzanero continuaba trabajando de forma ardua y disciplinada, su carrera profesional en la música empezó a vislumbrar nuevos horizontes.
Doce años después de haber compuesto su primera melodía, en 1962, obtuvo el quinto lugar en el Festival de la Canción en México. Esto fue un gran aliciente para él y le motivó a seguir esforzándose, lo cual rindió frutos, pues en 1967, consiguió lanzar su primer disco titulado Mi primera grabación.
Algunas etapas de su carrera no tan gratas que experimentó fueron cuando en 1970, tuvo que enfrentar disputas legales con el canta autor estadounidense Sid Wayne.
Wayne había trabajado ya por algún tiempo con el rey del rock, Elvis Presley, a quien le componía canciones de forma regular
Resulta ser que Sid Wayne, quien componía canciones para Elvis Presley, tradujo y versionó su canción “Somos novios” al idioma inglés, bajo el título “It’s impossible”.
Al parecer todo estaba bien e incluso Manzanero accedió a pagarle regalías por su trabajo, sin embargo, sin el consentimiento de Manzanero, Wayne añadió una nota más para que la frase “somos novios” coincidiera con la versión de “it´s impossible”.
Lo que sucedió fue que al añadir una nota más a la partitura de la canción, esta coincidía con la del compositor francés Jacques Diéval y la canción “J’ai mal de toi”, que fuese interpretada por la cantante Frédérica en 1960 para el Festival de la Canción de Eurovisión.
A pesar de la disputa legal, todo se solucionó y se aclaró estableciendo que en realidad Manzanero no había tenido ninguna injerencia en este cambio y fue hecho sin su autorización.
Armando Manzanero conjugó el arte con la canción
Durante siete décadas este compositor mexicano nos deleitó con su inspiración y sus grandes virtudes como la sensibilidad, creatividad y la visión y constancia que mantuvo a favor de su oficio como músico consagrado.
A través de la puesta en ejecución de su capacidad imaginativa, combinada con una narrativa musical prolífica, Armando Manzanero ayudó a cimentar el significado de romance, con canciones como “Adoro”, “Esta tarde vi llover”, “Somos novios” y “Contigo Aprendí”, llegando a ser considerado uno de los máximos exponentes de la composición.
Fue un compositor de gran sensibilidad en el piano, intérprete, productor y arreglista; grabó más de 30 discos y participó en programas de radio y televisión.
Musicalizó películas y temas de su autoría han sido incluidos en diversas cintas. Exportó su obra a importantes escenarios del mundo como el Lincoln Center, Madison Square Garden en Nueva York, el Memorial en Sao Paulo, el Canecao en Río de Janeiro, y los teatros Colón en Buenos Aires y Teresa Carreño en Caracas.
Reconocimientos internacionales a un talento global
Además de compositor, Manzanero llevó una vida activa dentro de la sociedad mexicana, sobre todo en temas relacionados con la música.
A principio de los 80, fue elegido vicepresidente del Consejo Directivo de la Sociedad de Autores y Compositores de México; en 2007 fue nombrado presidente adjunto.
Una de las causas que apoyó sin cesar, fue abogar a favor de los Derechos de Autor.
Sus colegas reconocieron el compromiso incansable que demostraba a favor de esta causa y esto le valió ser escogido para ocupar el puesto de presidente de la Sociedad de Autores y Compositores de México, hasta el día de su muerte.
Ha sido recipiente de muchos reconocimientos como haber ganado dos Latin Grammy Awards, un Lifetime Achievement Grammy Award por su trayectoria artística, siendo el único mexicano en obtenerlo.
Además, fue nombrado Patrimonio Cultural de las Américas en 2015, por la Organización de los Estados Americanos (OEA), gracias a su influencia en la música hispanoamericana a lo largo de su carrera.
Se le otorgó la Medalla Héctor Victoria Aguilar (máximo reconocimiento del Congreso del Estado de Yucatán) en 2016; la presea Gran Maestro otorgada por la SACM, y el Premio Trayectoria Artística de los Billboard de la Música Latina en 2020.
La historia de la canción que nació al ritmo del vals peruano
“Adoro” es sin duda, una de las joyas que coronan la exitosa carrera y el trabajo artístico de Armando Manzanero
Músicos y compositores siempre nos cautivan cuando comentan la historia detrás de las canciones, como fueron concebidas, cómo nacieron y es ahí cuando nos damos cuenta que de los momentos más cotidianos pueden surgir historias que conquistan al mundo.
“Adoro” tiene una historia propia y emotiva detrás, que sucedió cuando Manzanero regresaba a México luego de un viaje a Perú, en 1965. Su estadía en dicho país le marcó y fue tan significativa que se inspiró en el vals peruano y artistas como Chabuca Granda y Augusto Polo Campos, para componer esta maravillosa canción.
Aunque el vals peruano tiene otro ritmo más sonoro, la capacidad creativa del compositor le llevó a adaptar la letra que había escrito para convertirla en una balada inmortal.
“Adoro”, un autor y muchas versiones conquistan el corazón
Esta canción no tiene récord como la más interpretada por cantantes, pero de seguro marca el récord en el corazón de muchas personas que vivieron en la época cuando la música y las letras eran en serio, de calidad.
La prueba infalible es que aún en tiempos modernos, esta canción sigue calando en el corazón de quienes la escuchan, por la ternura y el amor expresado a través de sus letras.
El primero en interpretar este tema fue Carlos Lico, mexicano que en aquellos años cuando fue compuesta, ya gozaba de renombre en América Latina. Poco tiempo después Manzanero mismo la grabó bajo el signo RCA Víctor, lo que hizo posible que sus composiciones llegaran a Europa.
Aunque son muchas las versiones de “Adoro”, hubo una que se destacó de las demás y fue la interpretación de Bronco, un grupo musical mexicano cuyo fundador y voz líder fue el finado Lupe Esparza.
Fue la interpretación de esta agrupación la que la llevó a alcanzar niveles de popular no imaginados y la que más copias de esta versión vendió.
“Adoro” logró llegar a cada rincón del mundo y su popularidad aumentó mucho más en países asiáticos y europeos como Corea, Japón, España e Italia, sin olvidar que el tema llegó a interpretarse en más de cinco idiomas.
Armando Manzanero: Adiós a un talento inmortal
Después de transcurrir más de medio siglo dedicado a la industria musical, el atril del piano de Armando Manzanero dejó de sostener partituras y enmudeció conmovido mientras la tapa era bajada de forma solemne para honrar a su dueño.
El cantautor mexicano Armando Manzanero falleció en 2020, dejando tras de sí un legado inolvidable en la historia de la música en español, con una impresionante cantidad de discos vendidos e innumerables reconocimientos, como un Premio Grammy honorífico en 2014.
El alma del autor de clásicos de la balada romántica latinoamericana, como "Somos novios", "Voy a apagar la luz", "Contigo aprendí" y "Esta tarde vi llover" al final descansaba, mientras se elevaba a su creador, dejando un legado musical terrenal como pocos.
Un artista incombustible, cuya llama arderá por siempre
A lo largo de sus 70 años de trayectoria, Manzanero publicó más de 30 trabajos discográficos, musicalizó numerosas películas y escribió más de 400 canciones.
Fue calificado como "el más importante compositor vivo de la música mexicana", figurando además como un gran productor musical y actor, quien tuvo la oportunidad de participar en la novela más taquillera de todos los tiempos en la televisión latina “Betty La Fea”.
Sus temas han sido versionados a lo largo del tiempo por artistas de la talla de Elvis Presley, con "It's impossible", una versión en inglés de "Somos novios", Dionne Warwick, Tony Bennett, Alejandro Fernández o Christina Aguilera.
Además, produjo a muchos artistas mexicanos, apadrinó conciertos y buscó nuevos talentos, convirtiéndose en un referente de la industria cultural mexicana.
Desde su rol como presidente de la Sociedad de Autores y Compositores de México, cargo que ocupó desde 2010, luchó para dignificar la labor de los artistas y reconocer la autoría de sus obras.
Fue un incansable luchador a favor de aquellos tenían gran talento y deseaban expresarlo, pero habían sido víctimas de plagio, sin tener recursos para poder defenderse en los tribunales.
Tras su deceso, muchos fueron los que manifestaron su pesar por haber perdido no solo a un colega, sino a un gran amigo de siempre.
Uno de ellos fue el escritor Carlos Mosiváis, quien expresó palabras emotivas y lo consideró uno de los pocos compositores capaces de transmitir en tres o cuatro minutos una melodía compleja junto a letras sencillas que entendía todo el mundo.
Siendo uno de los compositores mexicanos más reconocidos, este incansable artista sigue vigente en sus composiciones musicales, que tocan el corazón y el alma de incontables personas en todo el mundo.
Su legado está grabado en la historia de la música romántica.
