Por: Redacción
Las letras de una canción son el equivalente del alma al cuerpo. Si bien la música da un complemento valioso, el sentimiento llega a través de las letras.
Eres estudiante de música, vas avanzado en el curso que decidiste tomar y te encanta lo que has aprendido, sin embargo, a pesar de que conoces más sobre acordes, ritmos, géneros y música en general, te falta inspiración cuando llega el momento de escribir la letra de una canción.
Si te has identificado con esta situación, debes empezar a trabajar un poco más en ti mismo, conocerte como artista; pero para lograrlo primero hay que conocerse como ser humano, quien eres, donde has estado y hacia dónde vas.
Guíate por Las Emociones Básicas
Siempre nos dicen que el pasado debe dejarse atrás, pero cuando al hablar de inspiración para escribir letras de canciones no hay nada mejor que esculcar el pasado y rescatar experiencias vividas.
Ahora bien, lo importante es identificar experiencias que valgan la pena. En la vida de todo ser humano hay sentimientos que llegan directo al corazón y esas son las emociones básicas definidas por Ekman, que algunos afirman no son seis sino cuatro y puede que tenga algo de razón, no obstante, hay que profundizar en estudios.
No obstante, siguiendo hipótesis, las emociones más básicas de todo ser humano son: felicidad, miedo, tristeza e ira.
Estableciendo los detonadores de emociones
Una vez conoces las cuatro emociones básicas que pueden ser útiles para reflejar en la letra de una canción, lo que sigue es ubicar cuál (o cuáles) son los detonadores que despiertan dichas emociones; por ejemplo, al hacer referencia a la felicidad, es una emoción que puede generarse a través del amor, la familia, compartir con amigos y muchos otros elementos más.
Entonces, tienes que ubicar cuál será el detonador que usarás en la letra de tu canción. El amor es el más común. Si has decidido usar el amor para detonar emociones de felicidad tendrás que remontarte a experiencias propias o ajenas donde se refleje, por ejemplo, cuando conociste a tu primer amor, o expresando la felicidad que esa persona trajo a tu vida.
En ese patrón, tienes canciones desde Julio Iglesias hasta Maluma (Primer Amor). Los compositores experimentados han desarrollado la destreza de trabajar otros detonadores como la tristeza, escribiendo letras de canciones como Desde aquel día (Raphael).
El tema de la familia también es abordado y uno de los que ha utilizado la familia como detonador de tristeza es Roberto Carlos con su inolvidable canción Lady Laura, dedicada a su madre ausente, que hace brotar una lágrima cuando la escuchas.
Como recomendación final, se reitera el hecho de conocerte mejor como ser humano, despojarte de las ropas del mundo y desnudar el alma, permitiéndote recordar, reír y llorar sobre recuerdos y abrir tu pecho dejando saber que anhelas para el futuro, como lo hizo Sergio Andrade al componer Tiempos Mejores, canción ganadora del Oti.