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| Cuidar la salud vocal es importante en un cantante de orquesta |
Ahora que se va extinguiendo el verano y acaba la temporada para todos aquellos cantantes que han estado trabajando en diferentes orquestas a lo largo y ancho de todo el país, me gustaría dejaros unos consejos:
1. El momento ideal para poner a punto tu técnica vocal es justo ahora.
Es muy probable que debido a la intensidad del trabajo, las horas, los kilómetros recorridos y el sueño perdido... tu voz requiera un periodo de "puesta a punto".
Es el momento también de revisar tu técnica vocal para ver si aquello que haces lo puedes realizar de una manera más eficiente.
Seguramente sabes, después de haber realizado una gira, al final de la temporada, qué aspectos son los que más te preocupan:
- afinación
- notas largas
- notas agudas
- notas graves
- efectos
- etc
2. Para corregir los malos hábitos vocales necesitarás unos meses.
De nada sirve conocer tus defectos si no pasas a la acción, si no te pones a solucionarlos.
Si no lo solucionas, lo más probable es que cada vez "se hagan más grandes" y que al cabo de unos años tu salud vocal se vea comprometida con algún tipo de lesión.
Si en los próximos meses, en los que bajan el ritmo de trabajo y los compromisos, comienzas a trabajar con un buen experto/a en técnica vocal aquellos aspectos que eres consciente que tienes que mejorar llegarás al inicio de la nueva temporada con la nueva memoria muscular asentada y tu voz en plena forma.
3. El tipo de repertorio.
Los cantantes de orquesta han de mostrar una gran versatilidad, en general, para cantar las canciones más populares en sus actuaciones.
Cantar "lo último de lo último" si no es adecuado para tu tipo de voz requiere sobre todo de técnica.
El cantante ha de saber "cómo navegar" en canciones demasiado graves, demasiado agudas, más tipo rock, más tipo pop, más tipo balada... y para ello necesita de un buen entrenamiento.
Es muy importante, también, que la orquesta sea consciente de que las voces "no son de hierro", como las trompetas o baterías :) y que es necesario, en muchas ocasiones, adaptar los tonos correctamente.
4. La higiene vocal, insustituible.
Cuando el cantante recibe el calendario de actuaciones y el repertorio por parte de la dirección de la orquesta, debe procurar alternar los momentos de actividad vocal con el descanso adecuado.
Ello no siempre es fácil porque se ha de convivir con los compañeros/as, ensayar, hacer pruebas de sonido, etcétera...
Mi consejo es que cuando no se tenga que cantar se "mantenga la boca cerrada" :) dentro de lo posible, para que la voz descanse.
Importantísimo! La hidratación, ya sea bebiendo o haciendo vahos con manzanilla, y el descanso, como he referido.
5. El último responsable de tu carrera eres tú.
Si tú te "quemas" en una sola temporada o te lesionas en pocas, el director/a de la orquesta contratará otro cantante.
Si notas:
- que estás forzando,
- que te quedas ronco/a y al día siguiente no puedes hablar,
- que tienes picor y/o dolor mientras cantas,
- que te cuesta afinar,
- que el color de tu voz varía en sus diferentes partes de manera notable,
- que no lo pasas bien, no disfrutas al cantar...
entonces, toma decisiones.
Para terminar, os dejo unos vídeo consejos imprescindibles:
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© Isabel Villagar, profesora de canto
