Por: Redacción
Desde el centro histórico de Berlín hasta el barrio de Spandau, donde el río Spree y Havel convergen, la música llena cada rincón de esta ciudad europea.
Alemania ha sido el hogar de los compositores más famosos del mundo, como Bach y Beethoven, Händel, Wagner y Strauss que marcaron la transición entre las épocas clásica y romántica en la música clásica occidental.
Otro dato relevante acerca de Alemania y la música es que ocupa la quinta posición como uno de los mercados más grandes del mundo y ha ejercido una influencia muy grande sobre todo en los géneros pop y rock, habiendo tomado la iniciativa en la introducción del género trance en su momento.
Músicos de Alemania y, en particular, las bandas pioneras de Tangerine Dream y Kraftwerk, contribuyeron al desarrollo de la música electrónica.
La música clásica en Alemania
La reputación de Alemania como una nación musical sigue basándose en nombres de grandes compositores musicales clásicos, por lo que miles de estudiantes de todo el mundo acuden a sus academias de música, mientras amantes de la música moderna asisten a su amplia oferta de festivales musicales durante todo el año.
La Filarmónica de Berlín, se considera la mejor del repertorio de más de 100 orquestas sinfónicas de Alemania y el Frankfurt “Ensemble Modern” es una sala de máquinas fundamental detrás de la producción de la música contemporánea.
De los artistas, la soprano Waltraud Meier, el barítono Thomas Quasthoff y la clarinetista Sabine Meyer están entre los mejores del mundo. La violinista Anne-Sophie Mutter, incluso tiene muchos seguidores más allá de los entusiastas de la música clásica.
Nuevas tendencias en la música alemana
Karlheinz Stockhausen, el pionero de la música electrónica y el compositor de ópera tradicionalista, Hans Werner Henze, han tenido una gran influencia en la música contemporánea desde 1950.
Hoy en día hay una amplia gama de tendencias estilísticas: Heiner Goebbels combina música y teatro, mientras Helmut Lachenmann lleva las posibilidades de expresión instrumental a los extremos, mientras Wolfgang Rihm revela cómo en la forma en que se está desarrollando, parece posible que la música sea más comprensible.
En el otro extremo del espectro musical, los cantantes pop como Herbert Grönemeyer han disfrutado de éxito con canciones en alemán desde hace años, al igual que la banda de punk rock “Die Toten Hosen”, el grupo de hip hop “Die Fantastischen Vier”, y “Tokio Hotel”.
Más recientemente, el éxito de la banda de Berlín “Wir sind Helden” ha influido en toda una nueva ola de jóvenes bandas alemanas. La fundación de la “Academia de Pop” en Mannheim demostró el deseo de poner la música pop alemana a un nivel internacional.
La Fiesta de la Música alemana a la que todos deben asistir
En Berlín, desde el año 1995, se celebra la Fiesta de la Música en el mes de Junio, celebración que tiene una duración aproximada de una semana y marca el inicio del verano en este país europeo.
De manera similar a otros países alrededor del mundo, la fiesta es una celebración al arte musical y genera mucha convocatoria de audiencia, ya sea, como músico, cantante o simplemente como espectador.
En diversas plazas, bares y teatros de Berlín se presenta una serie de espectáculos que celebran la música, la mayoría de ellos son eventos gratuitos y participan, además, personas provenientes de diversas ciudades y países.
Siete festivales de música a los que puedes asistir en Berlín
Fusión Festival: Hablar del Fusión Festival como un festival de música quizás no es la manera más adecuada de hacerlo. El colectivo Kultur Kosmos, que organiza desde 1999 el festival, intenta crear una sociedad paralela durante cinco días, celebrar la libertad, hermandad y la fraternidad a través de la música y las artes escénicas.
MELT Festival: En este festival se destacan apuestas arriesgadas, mientras el indie, la electrónica, y el hip-hop se dan la mano. Entre hierro y agua tiene lugar esta cita indispensable para los amantes de la música. Un museo al aire libre que año tras año hace eco de lo mejor del panorama, en una fiesta que no para desde que su inicio.
Lollapalooza: El festival Lollapalooza surgió en una gira de despedida del grupo Jane’s Addiction en Estados Unidos. En 2005, el concepto Lollapalooza resurgió como festival urbano en Chicago, para más adelante adquirir dimensión internacional celebrándose en varias ciudades del mundo hasta llegar a Berlín en 2015. Rock, pop–rock, electrónica, hip-hop e indie son los tipos de música que se pueden encontrar en la edición alemana de este festival.
A Summer´s Tale: En este festival se dan la mano muchos artistas, con una amplia programación de lecturas, talleres, espectáculos y actividades en familia en un paraje idílico, y desde el que se apoya el reciclaje, el consumo ético y sostenible.
Garbicz: Detrás de una puerta coronada por dos unicornios, una tierra fuera del tiempo se abre para emprender un viaje especial. El festival Garbicz ofrece un curso atípico dentro del mundo cultural contemporáneo, un festival transformador, no comercial y ecológico, dispuesto a ofrecer experiencias multifacéticas, donde la música es comprensible como un vínculo entre los participantes.
Berlín Atonal: Este festival se ha convertido en una peregrinación esencial para los fanáticos de los rincones oscuros, de la música techno y ambiental, de los sonidos experimentales y de los visuales y proyecciones más alucinantes. Es indudable la importancia que para este festival tiene también su emplazamiento, donde cada recoveco del espacio industrial llamado Kraftwerk amplifica la experiencia de una manera increíble a través de su sistema de sonido excepcional.
Pop-Kultur: El festival Pop-Kultur se fundó en Berlín en 2015 y tiene como objetivo hacer énfasis en la internacionalidad y la diversidad sexual, propiciando la creación de un espacio discursivo para la cultura pop y especialmente la música pop. Además, permite la reflexión, contextualización y sobre todo la celebración. Todo a través de la música, charlas, lecturas, exposiciones, instalaciones, talleres y proyección de películas.
