Por: Redacción
El cine y la música siempre han estado unidos.
No puede existir uno sin el otro y su complemento los puede llevar a alcanzar resultados de popularidad impresionantes.
Hoy haremos una revisión a la primera parte de la historia de las mejores bandas sonoras que ha tenido la historia del cine desde los años 70 hasta llegar a nuestros días y de la misma manera, aprenderemos un poco sobre las bandas sonoras de películas que hicieron historia.
Bandas sonoras de los años 70
La industria del cine en esta década estuvo impregnada por un espectro de opiniones, a favor y en contra de sus creaciones cinematográficas, sobre todo porque se le comparaba con las producciones que se habían realizado en la época de oro del cine Hollywoodense, como los fueron los años 50 y 60.
Sin embargo, y con el propósito de ser lo más imparcial posible, debemos estar claros que las generaciones (al igual que hoy) iban evolucionando, reemplazando gustos, preferencias y actitudes por nuevas opciones influenciadas por la rebeldía característica de una sociedad en una época post movimientos hippies.
Algunos opinan que fue una de las mejores épocas de la música en el cine, una de las más creativas, sin embargo, otros comentan que eran producciones musicales con menos calidad artística, ya que los grandes maestros tradicionales estaban retirándose de la escena musical.
Fue una época transitoria, donde una sociedad cedía espacio del rock and roll de Elvis y otras agrupaciones como The Beatles, Led Zeppelin, The Door o Pink Floyd para pasar al disco, con amplia influencia afroamericana, hasta culminar con el pop de los años 80.
Ahora bien, ¿cuáles fueron las mejores bandas sonoras de estos años?, las detallamos a continuación:
La banda sonora de Tiburón
Son más las personas que mueren por otras razones, que por el ataque de un tiburón blanco. No obstante, en 1975, John Williams en conjunto con Steven Spielberg, le hicieron al mundo creer otra cosa.
Sin duda alguna la película se convirtió en una de las más terroríficas de su época hasta el punto de cambiar el comportamiento de cientos de miles de personas en todo el mundo que, luego de ver la cinta, pensaban dos veces antes de entrar al agua un poco más allá de los límites.
La banda sonora original compuesta por John Williams, quedó grabada en la memoria de millones y solo con tararearla sabíamos de qué se está hablando.
John Williams, colaborador asiduo en la filmografía de Steven Spielberg, ganó un Premio Oscar a la mejor banda sonora por el tema central de Tiburón (Theme From JAWS), que es todo un referente en el cine de suspenso gracias a sus notas estridentes y repetitivas, que simulan el acercamiento del peligro inminente.
Star Wars, la banda sonora que rompió el molde
Durante varias décadas, instrumentos como el violín y el piano habían sido los actores principales de bandas sonoras compuestas por grandes de la música en el cine, como Newman, Steiner o Rózsa.
Las partituras se expresaban en muchos casos con notas agudas del pentagrama y en los esquemas había poca percusión.
Pero en los últimos años de la década de los 70 llegaría alguien a quien le fue encargada la producción de música para película que rompería todos los esquemas y se convertiría en una verdadera locura del marketing.
A John Williams, un joven de solo 35 años se le encomendó la labor de crear una composición musical cinematográfica que rompiera la estructura de la época y reviviese el sinfonismo activo y dramático de una orquesta de cámara.
Y parafraseando a Britney Spears… ¡John lo hizo otra vez!
En 1977, entregó su obra a su creador y productor George Lucas, quien no pudo haber estado más complacido con el producto final. De seguro recordamos el tema, pues es la música principal de Star Wars, cuando todo comienza y leemos letras que se van elevando al infinito mientras cuentan la historia de lo que la audiencia estaba a punto de ver.
Su esfuerzo, creatividad y dedicación le valió un Premio Oscar 1978 a la Mejor Banda Sonora Original, mientras la película cosechaba otro par de Oscars en paralelo.
Ahora los graves del pentagrama comenzaban a expresarse con fuerza y a partir de entonces, Williams continuaría su saga original cosechando más triunfos en 1980 con la ‘Marcha Imperial’ de ‘El Imperio Contraataca’, donde los instrumentos de viento y percusión se convierten en fieles acompañantes.
Su nombre comenzaría a convertirse en una leyenda viva de la música de cine con posteriores creaciones para ‘Supermán’ (1978), ‘En busca del arca perdida’ (1981), E.T. el extraterrestre (1982) y un largo historial trabajado junto a Steven Spielberg y George Lucas.
Una banda sonora que dio mucha pelea
La película Rocky sirvió de inspiración para toda una generación.
Su música y su tema principal han sido icono de las bandas sonoras del cine durante años, gracias a su tema original, la super reconocida canción, “Gonna Fly Now”, magnífica obra de sus creadores Bill Conti con letras de Carol Connors y Ayn Robbins e interpretada por DeEtta West y Nelson Pigford.
Además de Gonna Fly Now, la banda sonora de Rocky incluye otros temas imprescindibles como Philadelphia Morning, Going the Distance, The Final Bell y Rocky's Reward.
Se dice que estas canciones ayudaron a crear la particular atmósfera emocionante y motivadora que define la película, a través de la que se nos cuenta la inspiradora historia de un boxeador llamado Rocky Balboa (Sylverster Stallone) y su lucha por alcanzar la grandeza.
Además de sus múltiples usos en otras muchas piezas audiovisuales y publicitarias, la banda sonora de Rocky es recordada por haber sido galardonada por un Premio Oscar de la Academia a la Mejor Banda Sonora Original en 1977.
Grease, banda sonora creada para la posteridad
Barry Gibb, John Farrar y Jim Jacobs and Warren Casey, entre otros fueron los que le dieron vida a esta banda sonora para película estrenada en 1978, que tuvo como protagonista a John Travolta y Olivia Newton-John.
Aún Travolta no terminaba de cosechar los éxitos de ‘Fiebre de Sábado por la Noche’ cuando se embarcaba en esta producción musical ambientada en los años cincuenta y que incluía como coprotagonista a la australiana Olivia Newton-John.
El trabajo creativo previo entre los compositores, luego de haber ganado el Premio Oscar a Mejor Banda Sonora Música Original el año anterior, les valió una nominación al Premio Oscar a la Mejor Canción por el tema: ‘Hopelessly Devoted to You’ que interpretó Newton-John.
Aunque no ganaron, el éxito del musical fue apoteósico, logrando colocar su música en el peldaño de los íconos representativos de la década.
Bandas sonoras de los años 80
Los últimos años de la década del 70 reavivaron la industria musical cinematográfica e inspiró a los tomadores de decisión a producir material con una dosis de acción más alta.
Películas como ‘Conan’, ‘Depredador’, ‘Acorralado’ y otras llenaron la pantalla junto a una nueva generación de compositores creadores de grandes bandas sonoras.
Fue un periodo de inspiración para muchos compositores. La originalidad de muchas películas permitía desarrollar la imaginación como nunca había ocurrido hasta entonces.
Además, en los ochenta todo era mercadeable, la música de cine se popularizó cada vez más y ahora podías comprarla para tenerla en casa. Así se creó la comercialización de discos para coleccionistas de bandas sonoras.
Esta, fue una década de efervescencia musical. Por ejemplo, en 1986 la música Pop estaba en pleno esplendor. Era una época de grandes canciones de grupos y solistas.
Banda sonora de Memorias de Africa (1985)
La banda sonora de Memorias de África (1985) fue a cuenta del compositor británico John Barry, galardonado en múltiples ocasiones y creador de reconocibles melodías cinematográficas para títulos tan icónicos como como King Kong (1976), James Bond´s Goldfinger (1964) o Cowboy de Medianoche (1969).
La banda sonora de esta canción ganó el premio Oscar a la Mejor Banda Sonora en 1986, impulsando la carrera del compositor, quien luego haría participaciones magistrales en ‘Bailando con Lobos’ de 1990
Los ochenta abrieron el camino a otras sagas inolvidables en el terreno de la música, como la saga de ‘Indiana Jones’ (John Williams) y ‘Rocky’ (Bill Conti).
Fue una década donde los grandes de la música pop coquetean con el cine. Aunque algunos ya lo venían haciendo desde los setenta, como Paul McCartney o los Bee Gees.
La Banda Sonora de ET El extraterrestre
De la misma forma que nos enseñó a tener temor al agua por la presencia de un tiburón blanco, Williams nos enseñó con su música que E.T. el extraterrestre (1982) no era un extraterrestre tan feo o temible.
Nos mostró su lado amable, simpatía y calidez a través de su relación con los personajes de la película. Su música es deliciosa, y ha convertido la banda sonora del film en una de las más representativas de su carrera como compositor de bandas sonoras.
A través de sus notas musicales e instrumentos de percusión entre mezclados con violines y otros nos deja un sentimiento de ligereza, aventura y la adrenalina por conseguir ese objetivo, luchando de forma sublime junto a un amigo extraterrestre.
Con todo el reconocimiento que se merecía, logró hacerse ganador del Premio Óscar a la Mejor Banda Sonora Original en la edición 55 de la Academia de Hollywood en 1983.
Fue en los ochenta también, cuando surgió como práctica común de contribución entre colaboradores asiduos. Tal es el caso de Mark Knopfler, Carly Simon, Phil Collins, Lionel Richie, etc.
Muchos de ellos acapararon los premios de la Academia de Hollywood a la mejor canción durante este periodo.
Banda Sonora de ‘La Misión’
Mientras Robert DeNiro y Jeremy Irons se preocupaban por aprender los guiones para su participación en esta película de corte histórico, Ennio Morricone, el magnífico y extraordinario compositor, se enfrascaba en darlo todo para crear una banda sonora que estuviera acorde a lo que la historia relataba, su esencia y sus protagonistas.
A lo largo de las décadas, el estilo de Morricone se fue abriendo a la experimentación, incluyendo entre sus piezas una amplia gama de instrumentos y elementos sonoros poco convencionales que tradujeron sus aportes para el cine en melodías memorables que han traspasado generaciones.
La academia le otorgó un Grammy en la categoría de Mejor Composición Instrumental Escrita para una Película o Televisión por la banda sonora de La Misión, que también le valió ser el ganador de un Globo de Oro.
Banda Sonora de ‘Elegidos para la Gloria’
"Elegidos para la Gloria" (The Right Stuff) es una película de 1983, en la que se adapta el libro homónimo de Tom Wolfe. Este laureado filme aborda en paralelo la intensa vida de los pilotos involucrados en las peligrosas pruebas para superar la velocidad del sonido en la base de la Fuerza Aérea de Edwards, así como la de aquellos que fueron seleccionados para el Proyecto Mercury de los Estados Unidos que tenía como objetivo enviar a algún americano al espacio.
Los épicos temas originales de la Banda Sonora fueron escritos por Bill Conti, pero también se introdujeron distintos fragmentos de la suite ‘Los Planetas’ de Gustav Holst, especialmente en los instantes de la cinta donde se rememoran los históricos lanzamientos de las sondas Mercurio.
Como en el filme, hay una primera parte dedicada al fantástico reto semiclandestino de Yeager para alcanzar la velocidad Mach 1 en un avión de combate, y una segunda centrada en la populosa y mediática aventura de los astronautas de las Mercury.
La banda sonora se hizo acreedora a un Premio Oscar de la Academia por Mejor Banda Sonora en 1984.
La Banda Sonora de ‘Un pasaje a India’
Es un tema solemne y ceremonioso en el que los sonidos de un sintetizador con cierto tono misterioso compuestos por Maurice Jarre, abren el camino a una poderosa melodía sinfónica retentiva, con destacada presencia de los vientos, percusiones y arpas.
Es una música de apariencia pomposa, muy enfática, que viene a emular en parte la fascinación por un lugar exótico (India), pero en especial por el poder y la ritualidad de los colonizadores.
El compositor nos inmersa en un viaje mágico a través de toda la banda sonora, llevándonos por acentos musicales indios, hasta música que evoca el estilo inédito francés de Edith Piaf, con un suave toque francés en la composición de “Back to England”.
Esta magnífica creación musical ganó un Premio Oscar a la mejor Banda Sonora en 1985.
Todas estas son partituras inolvidables, que forman parte de la larga lista de grandes composiciones de la historia del cine.
Un período de transición musical entre décadas
A pesar de que en los años 80 se hicieron algunas películas con grandes creaciones musicales como Fama o Yentl (Barbra Streisand) no hubo mucho entusiasmo por seguir haciendo las cosas así en los años 90.
Quizás sería porque había tanto que hacer y que ofrecer en otros géneros que, la verdad, había que tomarse un respiro.
Si bien es cierto que algunas películas como ‘Flashdance’, ‘Noches de sol’ o ‘Dirty Dancing’ fueron incluidos en el género. Nunca estuvieron a la altura de sus producciones predecesoras, ni la calidad o exquisites musical que aquellas ofrecían.
Además, estaba comenzando a gestarse lo que sería el periodo más importante de la historia de Disney, cuando Alan Menken comenzaría su periplo de grandes obras y grandes reconocimientos.
Y el primer gran éxito se daría a finales de la década, en 1989 con ‘La sirenita’, consiguiendo el Óscar a la Mejor Banda Sonora y Mejor canción.
Este descanso y alejamiento de composiciones musicales magistrales para películas coincidiría con el máximo esplendor de nivel creativo en canciones que desde los ochenta y noventa, no vendrían a reactivarse sino a partir del siglo XXI.
Una Generación De Compositores Irrepetibles
Ya hemos mencionado en diversas ocasiones que, según los anales de la historia musical, ha habido tres grandes generaciones de compositores:
A mediados de los treinta, los padres de la música de cine: Max Steiner, Alfred Newman, Miklós Rózsa, Franz Waxman, Erich W. Korngold etc.
A partir de los sesenta, los que le dieron un sello propio a la música, haciéndola popular como: Elmer Bernstein, Georges Delerue etc.
Los setenta tuvieron su apogeo con Henry Mancini, Francis Lai, John Williams, Ennio Morricone, Jerry Goldsmith
A partir de los ochenta una generación de prodigios que aportaron con su música un mundo de imaginación y creatividad al cine de directores jóvenes con gran talento.
Nos referimos a maestros como James Horner, Alan Silvestri, Hans Zimmer, Thomas Newman, James Newton Howard etc.
Esta generación de jóvenes artistas, donde la mayoría tenía una formación musical extraordinaria, encontró su hábitat natural en un periodo donde el cine se llenaba de películas llenas de aventuras e historias fantásticas que daban margen a partituras grandilocuentes.
Y cuando la historia era ‘algo más tranquila’ pero con magníficos guiones, el compositor se daba un respiro y escribía hermosas melodías que de seguro todos vamos a recordar.