Por: Redacción
Educación, neuroeducación y ahora técnicas educativas musicales que incluyen todo lo aprendido desde la perspectiva de la neuroeducación.
 |
| Música y cerebro: ALIADOS !! |
La música siempre será un placer para el cerebro.
Este artículo se centra en explicar el proceso de creación musical, que es el que mayor activación cerebral provoca y que conlleva los grandes beneficios cognitivos. Escuchar e incluso imaginar la música también afectan de forma notoria a nuestro cerebro.
La neurociencia, rompiendo paradigmas educativos
Muchos estudios son los que ya han comprobado los efectos que la música causa en el cerebro humano y es conocido que activa el sistema de recompensa cerebral casi como lo hace cualquier otro estímulo biológico como comer algo agradable, compartir un beso con la persona amada o una simple tomada de manos en las primeras etapas del noviazgo adolescente.
Relación entre la educación musical y las tareas escolares
Al hacer analogía entre un proceso educativo y otro se puede ver que aprender a tocar un instrumento musical requiere cierta práctica, atención, buena memoria y oído musical desarrollado. Todas estas capacidades podrían transferirse a otras áreas y ayudar al alumno a mejorar su rendimiento académico.
Efectos de la Música en el aula escolar
Dentro de los hallazgos encontrados está el hecho comprobado que los alumnos que están expuestos a la música fuera del contexto escolar tienen mayor disposición a aprender más sobre el tema.
Un estudio estadounidense que involucró a miles de estudiantes de diferentes niveles de educación primaria concluyó que los alumnos que estudian música como materia complementaria, fuera del horario escolar reglamentario demuestran tener más interés que aquellos que reciben educación musical dentro del aula escolar.
En general, los alumnos manifiestan un interés por la música fuera de la escuela muy superior al que muestran dentro. Los autores de este estudio sugieren que, para mejorar el interés que despierta esta materia entre los alumnos, se debería promover una mayor autonomía en el aprendizaje musical sin hacer tanto hincapié en el proceso calificador del aprendizaje, algo que sin duda debería generalizarse al resto de materias.
No obstante, cambiar esos esquemas evaluativos es casi imposible, puesto que es parte del proceso enseñanza aprendizaje actual, sin embargo, no es tarde para empezar a hacer una revisión al proceso y entender la forma de cómo puede hacerse un cambio para que los estudiantes se interesen más en la música, sin el estrés de obtener una buena calificación.
Utilizar la música en el aula, entre otras muchas cosas, puede facilitar el aprendizaje, como sucede al aprender las letras del alfabeto con una canción, llenar de energía al grupo, proporcionar relajación tras un estado de estrés, estrechar vínculos de amistad entre los compañeros y estimular la creatividad o motivar al alumnado para seguir perseverando ante una tarea.
Se hace evidente que es necesario tener en cuenta qué tipo de tarea se va a realizar en la práctica y qué tipo de música puede ser las más adecuada para acompañarla y colaborar en el proceso de aprendizaje, ya que es lo que realmente tiene mayor relevancia.
La relación entre Neuroeducación y los músicos
Tras la lectura de varios textos sobre neuroeducación en general, se podría concluir que escuchar música no estimula los procesos complejos cerebrales, pero tocar un instrumento musical sí. Por lo tanto, cuando se toca un instrumento, se está estimulando muchas partes del cerebro: la atención, la memoria, la coordinación motora, el lenguaje y el pensamiento creativo.
Para aprender algo de manera sostenible hay que implicar al sistema límbico del cerebro, que es responsable de las emociones y cuidar mucho el estado emocional presente a la hora de aprender porque si se estudia con curiosidad e ilusión se logrará mayor atención y concentración para captar la información y realmente aprender.
Consejos para músicos, basados en la neuroeducación
Existen ciertas recomendaciones básicas que se puede sugerir practicar a estudiantes de música que deseen absorber mejor la información enseñada en el aula de clases, sin importar la edad:
Respetar los periodos de descanso
Sobrepasar los niveles normales de tensión en el cuerpo pasa factura y en el caso del aprendizaje influye de forma directa. Es por ello de que se recomienda dormir la cantidad mínima reglamentaria de horas en la noche y de ser posible tomar descansos de unos 15 minutos al mediodía, luego de comer.
Crear un ambiente de aprendizaje adecuado.
Puede parecer superficial, pero tener un ambiente adecuado para aprender es crucial. Preocúpate por tener la temperatura y luz adecuada, aparte de procurar estar lo más alejado de posibles distracciones y ruidos.
La concentración es vital para aprender.
Si tienes un ambiente adecuado y has practicado una rutina de descanso y alimentación adecuadas no tendrás problemas en concentrarte y te será mas fácil memorizar la información para luego trasladarla a la práctica vertiendo emociones en la interpretación de la pieza musical.
El arte y la ciencia van siempre de la mano
Muchas veces se tiende a pensar que el arte es algo innato, lo cierto es que hay muchos aspectos del aprendizaje musical vinculados al método científico de ensayo-error y conocer cómo funciona el cerebro nos debe ayudar a fortalecer este tipo de pensamiento, a experimentar, asumiendo que el error es parte del proceso y que tocar bien no depende de algo mágico o de tener un buen día.
Un buen tutor hace una gran diferencia
Un docente excelente no solo sabe de su materia, sabe de otras afines y no tan afines, son buenos comunicadores y llenan de emoción sus clases, escuchan a los alumnos y se sirven de sus experiencias para mejorar su actividad docente, ayudando a los alumnos a adquirir un pensamiento crítico y racional y también a explorar los caminos de la creatividad.
La neuroeducación al final tiene que ver con la comprensión intrínseca del funcionamiento del cerebro humano, para poner en práctica técnicas de aprendizaje que facilitarán de buena manera el proceso enseñanza aprendizaje.
Sin embargo, gran parte de este aprendizaje concierne directamente al empeño que cada alumno ponga para aprender.
