Hoy comentamos la mítica película francesa "Los chicos del coro" (Les Choristes), de 2004, un clásico del cine con buenos valores
Por: Redacción
Cuenta la historia del poder sanador de la música, de las ventajas educativas de la música en cualquier contexto. Clement Mathie es un profesor de música y compositor que comienza su trabajo como "vigilante", que mejor sería traducido como tutor o ayudante de docencia en una escuela - internado de reeducación de menores en Francia.
Tras unos primeros intentos por empatizar con los niños y reconducir las actitudes negativas de los niños, decide familiarizarlos con los beneficios y virtudes de cantar juntos. Los resultados no tardan en llegar.
Vemos al profesor probar las voces y enseñarles a cantar ofreciéndoles consejos de técnica vocal, ejercicios adaptados, totalmente personalizados para ellos que escribe cada noche, cómo trabaja la rítmica con percusiones sobre las mesas y metrónomo, cómo les enseña notación musical.
Trabajando la voz infantil y adolescente colectivamente
En varios momentos se observa cómo da clases sobre postura cuando le pone su dedo sobre la coronilla de uno de los alumnos para que sienta la verticalidad de su cuerpo y se ponga un poco más recto para favorecer la fonación.
Incluso se le ve explicando respiración, articulación y resonancia en un momento breve del film (con música de fondo y voz muy reducida, como si fuera una muestra de las múltiples sesiones de trabajo).
A lo largo de la película se observa cómo los niños empiezan a sentirse parte de algo importante, a socializar de una manera más pacífica y a prestar mayor atención en el resto de las materias.
Sin duda es una muestra de que los beneficios de la educación musical tiene un impacto importantísimo en la formación integral de las personas.
Las sensaciones y las emociones que se experimentan cuando se canta en un coro son difícilmente comparables con cualquier otra experiencia de trabajo en equipo y es por ello que se fortalecen los lazos y el respeto hacia el trabajo colectivo.
Un reflejo cinematográfico de la buena y la mala educación
Muchas veces lo que reciben de la educación musical los niños es afecto, cariño, emociones positivas, hecho que consuela y reconforta cuando uno está pasando un momento difícil.
También se puede ver una dicotomía entre los métodos autoritarios del pasado de educación (la película se desarrolla en un gris, lóbrego y frío 1949) y una pedagogía más moderna que atiende a las necesidades afectivas infantiles y juveniles.
Los límites son importantes a la hora de educar, marcarlos, etc... sin embargo es fundamental poner a la persona en el centro, el estudiante es el protagonista y por ello sus necesidades afectivas no pueden estar en un segundo plano porque el cerebro no aprende si siente miedo.
Una película para melómanos entrañable muy recomendada
La película catapultó a la fama al coro que puso las voces. Hicieron giras mundiales y las partituras se editaron llegando a formar parte de la literatura coral contemporánea para niños.
La canción principal "Vois sur ton chemin" (que tanto nos recuerda a "La Tarara"), es conocida mundialmente. "Caresse sur l´ocean" es ciertamente un tema bello y digno de ser recordado, tiene incluso una parte a solo maravillosa.
Una hora y media de cine de calidad, para todos los públicos, con Gerard Jugnot y François Berléand. Tiene una clasificación IMDb de ocho sobre diez.
Si aún no la viste corre a calentar las palomitas y la manta para el sofá. ¡Muy recomendable!
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